UNA HISTORIA DIGNA DE SER CONTADA
A fines del Siglo IXX existían en Cerro Largo, ciudadanos preocupados por el destino de la agropecuaria nacional. En un libro titulado “La feria de Melo” el entonces diputado por Treinta y Tres, realiza una serie de reflexiones económicas. Don Francisco J. Ros de vieja militancia política y rural, escribe lo que reproducimos textualmente “La buena y nueva simiente que acaba de llevarse a todo el país, hemos de verla multiplicada en valiosa proliferación dentro de un lustro, cuando los vacunos que hoy sólo promedian 160 Kilos de carne logren alcanzar un promedio de 250 Kilos y las majadas, que hoy sólo dan 1,456 de lana, promedio, lleguen, lleguen siquiera a rendir 2,141, que es la mediana del departamento de Flores, que sirve de modelo compartido y está a medio camino de lo que se logra en los grandes países del mundo”. “La ocasión de proporcionarle a los productores, reproductores finos, en exposiciones ferias, permitirá que se duplique en breve tiempo el capital pecuario del departamento”. “Esta afirmación queda comprobada con sólo decir que con mejoras en calidad de ganado y en calidad de pasturas, con la misma área de campo y la misma cantidad de ganado, se logrará multiplicar la producción”. “¡La actualidad multiplicada por cuatro, dentro de las mismas áreas de campo, con sólo perfeccionar las razas!
¡El campo agrandado 4 veces en su rendimiento con sólo mejorar sus pasturas!”.
Quienes compartían este pensamiento del Diputado Ros, habían decidido años antes, pasar del pensamiento a la acción.
Corría el año 1896 cuando por iniciativa de Don Ramón E. Silveira, rodeado y apoyado por un grupo de vecinos animosos, estimulados por algunas regiones del país y de Argentina, acordaron constituirse en comisión para patrocinar la
celebración de una exposición ganadera. Reunidos a esos efectos, la idea fue aceptada con entusiasmo.
Don Ramón E. Silveira, principal ejecutor de esta idea, era un importante productor del departamento, con campos y haciendas en la llamada Cuchilla de San Ramón. Con clara vocación gremial, en 1897-98 aparece como vocal en la directiva de la Asociación Rural del Uruguay y en 1898-99 en su tesorero.
El acta de fundación de esta primera sociedad rural del departamento expresa: Se Conviene asimismo que la primera Exposición Feria se realizará el 1º de Enero de 1897.
La iniciativa tuvo que luchar con muchos inconvenientes. Muchos hacendados pensaban que la causa del mejoramiento era exclusivamente la diferente calidad de las pasturas, producto de la variada calidad de los campos y que los ganados criollos estaban probadamente adaptados a nuestras pasturas, lo que no se sabía de las cruzas o de nuevas razas importadas del exterior. La constante lucha de los mencionados ciudadanos y otros que los acompañaban, fue creando un ambiente favorable a la iniciativa.
Circunstancias ajenas a la iniciativa, y la de más peso obviamente el movimiento revolucionario que tuvo su epicentro en Cerro Largo, y que comenzó a fines del 96, echó por tierra las mejores intenciones.
Apenas concluida la revolución del 97 y firmada la Paz, acordada en el Pacto de la Cruz, Ramón E. Silveira, enorme luchador, persistió en su vieja idea del 96. Con mucha paciencia fue reuniendo a los ciudadanos interesados, a los que comprometió en su proyecto.
En efecto, en enero de 1900, parcialmente calmados los ánimos revolucionarios, se volvía a constituir en Melo, una Comisión de Exposición Feria. Secundaron a Silveira en ésta oportunidad entre otros, los señores José Francisco Lucas, Raúl Moreira y Angel Blocona. Bajo el patrocinio de este Comité, Cerro Largo vio realizada su primera exposición del 1º al 5º de marzo de 1901. El resultado de la misma, que se constituyó en una feria ciudadana que superó los cálculos más optimistas.
Se realizó en la actual Plaza Independencia, y en las calles de sus alrededores. Esta Sociedad cesó sus actividades en 1912, habiendo dejado un fecundo legado, marcando el rumbo del progreso de la ganadería regional.
En 1928 el Ing. Julio G. Soto (Director de la Escuela Industrial en ese entonces) con la colaboración del Ing. Julián Murguía, crean la Sociedad de Fomento de Melo, con el objetivo de fomentar las actividades agrícolas de los productores, realizando varias exposiciones de agricultura y granja.
Varios de los integrantes de se preocuparon de que dicha institución acogiera también los intereses de los hacendados, propiciando la fundación de una entidad que contemplara por igual los intereses y anhelos progresistas de agricultores y ganaderos. Fue así que el 19 de noviembre del año 1933, en una Asamblea realizada en el Teatro España, quedara constituida una nueva entidad llamada Sociedad Agropecuaria de Cerro Largo.
Desde entonces, la Sociedad Agropecuaria ha sido impulsada por una vía constante de progreso. Los propósitos iniciales se han cumplido, siendo considerada una de las principales organizaciones ruralistas del país. La opinión de la gremial tiene muchos valor en la sociedad, ya que ha sabido formar una tradición de dirigentes ecuánimes de juicio ponderado y con una gran atención a los problemas de la comunidad.
Al principio la institución funcionaba en un local de ferias ubicado, donde hoy está el barrio Sur de la Melo, en lo que era la vieja carretera a Treinta y Tres, a costados del Cementerio. Luego de varias reuniones de parte de la directiva se logró adquirir un campo situado en la 11ª. Sección, sobre las costas del arroyo Conventos. El Arq. Antonio Ubilla, demostrando una gran visión campera “se imaginó” la estructura del local, parado sobre una desolada cuchilla, de un campo degradado, cubierto de malezas.
Fue así que diseñó el esqueleto principal del Local Conventos, que se ha mantenido hasta el día de hoy.
Las exposiciones se iniciaron en el año 1935, llegando a ser la segunda en importancia en el país después del Prado, y logrando batir varias veces el récord de ventas en el país en exposiciones similares.
Hoy en la 75° Exposición Nacional y Concurso Reproductores Rústicos Seleccionados, 53ª Exposición Nacional de Aves, la Sociedad Agropecuaria se encuentra en un buen momento.
El Local Conventos ha sido modernizado, convirtiéndose en el más moderno centro de ferias ganaderas de la región.
Redefinió su visión y misión orientándola hacia el futuro. Por otro lado también se abrieron espacios de participación en las directivas y donde la mujer tiene un lugar en el cuerpo directivo de la institución. Pero también nutriéndose de las personas más
valiosas de la sociedad, en pos de aunar esfuerzos para la agropecuaria y para el desarrollo departamental.